Es tan interesante la historia y propiedades de la berenjena
como su mismo aspecto físico. Para mí es uno de los frutos vegetales más
exóticos en su forma, color y brillo. Su textura y sabor sorprende en sus
diferentes opciones para prepararla.
Originaria de la India y luego extendida su producción en
muchas otras zonas, incluyendo Costa Rica, tenía mala reputación al inicio de
la historia, pues se creyó que producía locura, entonces se le conocía como
“manzana loca o manzana de la ira”. Luego se estudió más a fondo y se descubre
que es útil para el sistema circulatorio, bajar el colesterol, ayuda contra la
aterosclerosis, combate las células cancerígenas y muchas otras razones
nutricionales y médicas. Lo que pasa es que tiene alcaloides (solanina), que al
consumirse cruda si puede afectar la salud, siendo recomendable consumirla
siempre cocinada.
Creo que sí hay algo de locura con tan simpático fruto!
Tanto beneficio y variedad de recetas, con resultados tan sabrosos como la sopa
que hoy les comparto, te alteran las ideas y las ganas de volver a probarla una
y otra vez!
Esta receta se hace a partir de la berenjena rostizada (al
horno), adaptada de una original servida con escalopines y crutones de pan de
nueces o linaza; yo le puse unas verduritas y usé tostaditas de pan,
pero la esencia es la misma y es para recomendar servir de entrada, o bien
cuando el plato fuerte sean carnes, pues tiene propiedades desgrasantes.
Requiere 2 berenjenas medianas, firmes y con buen brillo,
que no estén golpeadas, 4 tazas de caldo de pollo o de vegetales, 2 papas
pequeñas, 1 zanahoria pequeña y 3 vainicas tiernas, 1 pechuga de pollo, 2 ajos,
1 cebolla, sal, 1 limón ácido. Puede omitirse el pollo y hacerla solo de
vegetales.
Parta las berenjenas en mitades a lo largo, haga unas
pequeñas incisiones en la parte expuesta y barnícelas con aceite. Póngalas en
una bandeja y lleve al horno por unos 30 minutos hasta que suavicen y la
cáscara se arrugue.
Mientras ponga en una olla a cocinar el pollo 4 tazas de
agua, sal, ajos y cebolla. Cuando esté listo el pollo, retírelo del caldo y
añada ahí las verduritas partidas en trocitos a fuego medio. Desmenuce la carne
y reserve. Al estar listas las berenjenas se retiran con cuidado del
horno y se extrae con una cuchara la pulpa que ha de estar suave y se eliminan
las cáscaras. Se licua la mitad de la pulpa con 1 taza del caldo y se integra
de nuevo a la olla. La otra parte de la pulpa se puede majar con tenedor y
también se añade al caldo. Se deja calentar solamente a integrar sabores.
Para servir, se vierte una porción del caldo en cada taza;
Yo les recomiendo saborear este caldo así sencillo porque tiene un sabor muy
especial; para luego que cada quién le añada un poquito del pollo desmenuzado y
jugo de limón. Se acompaña con crutones o tostaditas de pan.