Las carnes son fuente importante de vitaminas del complejo B, entre ellas: tiamina, riboflavina, niacina, vitamina B6 y B12. Además son fuente importante de vitamina E. La carne es sin duda alguna una importante fuente de proteínas y sustancias esenciales para la formación de todos los tejidos del organismo. También es fuente de lípidos que proporcionan una parte de las calorías que necesitamos para el funcionamiento de nuestro organismo y que contribuyen a la formación de sustancias que constituyen las células de nuestros tejidos.
El consumo de carne proporciona minerales, tales como el calcio y el fósforo, necesarios para la formación de los huesos y los dientes. También es fuente de hierro que forma parte de la hemoglobina de los glóbulos rojos de la sangre. Existen diferentes tipos de cortes y algunas vísceras que son comestibles.
El corazón es el órgano más musculoso que posee la res, está cubierta con una capa ligera de grasa e internamente contiene venas y membranas. Al eliminar estas partes, se obtiene una carne de suave textura y tiene un delicado y sabroso gusto.
Se puede preparar en forma de guisado, sudada, cocida al vapor y en caldos. Internacionalmente la receta más sobresaliente son los “anticuchos” de origen Peruano. Consiste en adobarla y cocinarla en pinchos sobre las parrillas o asaderas.
En Costa Rica, hace muchos años se vendía un conjunto de trozos de corazón, bazo y pulmón, llamando a esto ASADURA (ver receta). No obstante, se fue sacando del mercado y es hoy en día difícil de obtener. Pero el puro Corazón si se encuentra con facilidad y puede prepararlo en salsa como les presento esta receta.
Se requiere de 1 corazón de res, 1 cebolla blanca mediana, 1 hoja de laurel, 1 ramita de apio, 1 de tomillo, 4 dientes de ajos, 1 taza de pasta de tomate, ½ taza de vino tinto, sal, orégano y condimentos al gusto.
Elimine bien la grasa externa del corazón, ábralo y quite las membranas y venas internas. Pique en tiras o trozos la carne obtenida. Adobe con ajos majados, sal, pimienta, salsa inglesa o el condimento de su gusto. Deje marinar por algunas horas.
Aparte se prepara una salsa, se sofríe la cebolla, apio, tomillo en un poquito de aceite, se agrega la pasta de tomate, hoja de laurel, orégano seco y 2 tazas de agua. Se mantiene en calor hasta hervir, se baja la temperatura, se condimenta y se agrega el vino tinto.
En una sartén aparte, a temperatura media, se pone 1 cucharada de aceite y se sofríen los trozos de corazón. Esto se hace rápidamente, apenas sellando la carne y un minuto más. Se retira y se incorpora a la salsa de tomate. Esto para mantener la suavidad primaria del corte de carne. Considere que si la fríe por mucho tiempo, tiende a endurecerse o doblarse (lo mismo pasa con los hígados de res). Se pone la salsa con la carne a fuego mínimo, por unos minutos para que la carne se asiente en el sabor de la salsa.
Otra opción, es cocinar los trozos adobados del corazón en olla de presión, por 30 minutos, en un caldo formado de agua, hierbas frescas y condimento. Al tiempo se escurren y se integran a la salsa de tomate y se deja calentar apenas a incorporar sabores. De esta forma se garantiza que la carne queda bien suave y se disfruta mejor.
Sirva acompañado de arroz blanco y de una ensalada verde fresca. Una receta salida de serie y muy sabrosa!