domingo, 12 de mayo de 2013

lengua en salsa de espinacas

Dicen por ahí que los domingos se come especial en el cielo. Es el día en que se lucen, que se dedica más tiempo a la cocina. En compensación a una semana de trabajo y para disfrutar y compartir entre familia y amistades. 

A veces el ritmo diario de  la vida nos lleva a preparar cosas simples y rápidas. Pero cuando se dispone de tiempo entonces es el momento de alistar algo que nos guste y que lleva más tiempo. En mi familia la lengua siempre ha sido el plato "especial" para dominguear. Es de hecho mi carne favorita y la he preparado ya de varias formas. 

Esta receta que les comparto hoy es una interesante manera de presentación. El color verde que aporta las espinacas, rompe el tradicional color de la salsa de tomate o la salsa blanca. Si bien la estoy usando para esta carne, creo que combina muy bien con otros cortes. 

Yo lavo bien con sal y limón la lengua y la enjuago. La pongo a cocinar en agua suficiente con ajos y 1 rama de tomillo en olla de presión por 30 minutos a partir del inicio del sónido de la válvula. La retiro, elimino el líquido, le quito la capa superior y la tajadeo una vez que este algo fría. 

De nuevo a cocinar en olla de presión por 30 minutos más, esta vez condimentada con sal, cebolla, chile dulce, hierbas y especias al gusto. Al tiempo saco la carne y reservo el caldo. 

Aparte se licua 1 rollo de espinacas tiernas con todo y tallo, con 1 poquito de culantro y 1 ramita de apio.  En una olla se colocan 2 cucharadas de mantequilla, 1 cucharadita de aceite, 1 cebolla picada fino hasta cristalizar. Se añade el licuado, un poquito de perejil picado, 1 taza de caldo reservado y se deja hervir (compruebe y rectifique la sazón de ser necesario). 

En 1/2 taza de caldo se disuelven 2 cucharadas de maicena (fécula de maíz) y se añade a la salsa para espesar. 
Aquí tiene la opción de servir la lengua, acompañada de arroz blanco, o unas papas (o puré) y bañar con la salsa verde. 

O bien, mezclar la carne en la salsa unos minutos, para que se integren mejor los sabores. Una idea para disfrutar de una especial receta, en domingo o cualquier día especial. 

3 comentarios:

Rosita Vargas dijo...

En casa de mis padres como entrante era de todos los domingos comer lengua de vacuno un verdadero manjar, que rica debe quedar con esa salsita,abrazos y abrazos.

recetas para dos dijo...

Me estoy imaginando esa salsa y hasta creo con que otra carne la podría acompañar. Gracias por compartirnos tan ricas recetas.

González Luis dijo...

Rosita gracias por la visita. Estamos compartiendo gustos. A ver si la disfrutas en esta versátil salsa.

Vane: la salsa para usar con otros cortes, puede funcionar con caldo de verduras o de pollo. La idea es aprovechar la riqueza de la espinaca completa.